AUSTIN, TEXAS (AP) — Un juez federal reprendió al gobierno del estado de Texas por mantener a los prisioneros retenidos en cárceles sin aire acondicionado, aunque se abstuvo de ordenar una solución antes de que lleguen los meses del verano en lo que se ha convertido en una de las demandas más grandes del país en torno a la seguridad de los reclusos en condiciones de calor extremo.
Sin embargo, las advertencias del juez de distrito Robert Pitman a Texas para tomar medidas después de determinar que las condiciones en el sistema penitenciario son inconstitucionales podrían tener repercusiones en otras partes del país, donde se llevan a cabo procesos judiciales similares, según los abogados que lideran el caso en Texas y otros grupos defensores de los derechos de los reclusos.
Texas es solo uno de varios estados, la mayoría de ellos en el sur del país, que enfrentan demandas sobre las condiciones de las prisiones cuando las temperaturas a menudo superan los 37,7 grados Celsius (100 grados Fahrenheit). En Luisiana, un grupo de reclusos de una penitenciaría estatal solicitó nuevamente esta semana a un juez federal que tome medidas para proteger a los prisioneros que realizan trabajos agrícolas al aire libre en condiciones de calor extremo.
“Texas es el sistema penitenciario más grande del país y el juez determinó que actuaba de manera inconstitucional e indiferente ante las condiciones peligrosas”, dijo Jeff Edwards, abogado principal en el caso de Texas.
“Cada alcaide y director de un sistema correccional va a estar consciente de ello”, expresó Edwards. “Envía un mensaje increíblemente poderoso”.
El caso de Texas no tendrá autoridad sobre las prisiones en otros estados. Pero Corene Kendrick, subdirectora del Proyecto Nacional de Prisiones de la ACLU, señaló que las decisiones del juez resultarán de suma importancia en las demandas que giran en torno al mismo problema del calor extremo, aire acondicionado limitado o inexistente, y reclusos en riesgo de morir.
